Foto: Nuestro Start & Finish fue en Palma
Domingo 7 de junio a las 23h, después de la simpática conferencia de nuestro amigo Guillermo Altadill, cogimos el ferry en Barcelona dirección a Palma de Mallorca.
Después de 8h llegamos a la Isla con la intención de dar la vuelta a la Isla de Este a Oeste, o que es lo mismo en el sentido contrario a las agujas del reloj.
Después de desayunar en el RCNde Palma empezamos a costear por el paseo marítimo hasta llegar a El Arenal.
De allí fuimos dirección para Cabo Blanco y Ses Salines. Con una media pájara (por falta de líquido) llegué a Ses Salines. De allí bajamos a la Colonia de Sant Jordi para comer un poco y darnos el primer baño en las cristalinas aguas de Cala Galiota.
De allí seguimos nuestra ruta dirección a Porto Colom pero con destino final a Porto Cristo. Al final nos salieron 120km en la primera jornada.
Tuvimos suerte en el alojamiento y fuimos a reponer fuerzas en una acogedora pizzería con vistas al puerto de Porto Cristo.
La segunda jornada desayunamos temprano y seguimos en ruta dirección Norte.
En Cala Ratjada volvimos a tomar un baño en cala Agulla.
Y de allí salimos dirección a Alcudia donde disfrutamos del atardecer con un bañito más.
Finalmente llegamos a Port Pollença por una bonita carretera .
Este segundo día comimos en un restaurante Chino.
Al llegar a Port Pollença de nuevo habíamos rodado más de 95 km. En Port Pollença habíamos quedado con nuestro amigo de Laser Master Hernan Celi y cenamos juntos en una pizzería a pie de bahía.
La tercera etapa prometía por el reto que nos tocaba cruzar la temida pero espectacular Serralada de la Tramuntana.
Con ilusión y dosificando energías afrontamos el puerto y paramos en el precioso Santuario de LLuc.
Por el camino encontramos muchas pintadas de ánimo de la tradicional carrera 312 que recorre la Serralada.
Desde Lluc, y antes de encarar para Soller, comimos en un sitio especializado de pollos.
Los paisajes eran preciosos y paramos para tomar fotos en el pantà de Gorg Blau o l´embasament de Cuber.
Los acantilados y las vistas fueron impresionantes.
A nuestra llegada a Soller baño obligado, cenamos en una pizzeria cerca de la Plaza Mayor y dormimos en una bonita casa rural.
Por la mañana madrugamos, cruzamos el Port de Soller y bajamos a Palma donde nos esperaba el ferry de regreso a las 11h de la mañana.
La Vuelta a la Isla en bicicleta ha sido una increíble ruta. Otro sueño conseguido y con ganas de poder volver a escaparnos con nuestras bicicletas.